martes, 25 de mayo de 2010

Los detalles de cada día...

Hay cosas aparentemente sencillas que pueden hacer un día especial. Desde el momento que me despierto y tengo el primer pensamiento del día, ya empieza toda una cadena de pensamientos que lo hacen bueno o menos bueno.

Generalmente mi primer pensamiento va para mis hijos, la bendición y entregarlos a la Virgen, luego empiezo a pensar qué tengo que hacer, de quién es el cumpleaños hoy, que mail he de enviar, a quien voy a ver... y como no... a veces sin que se conduzcan los pensamientos, aparecen esos preciosos detalles que han tenido conmigo o que yo tendré con alguien.

Dios se pasa de bueno conmigo y me bendice con amigos extraordinarios, soy una persona super afortunada al tener gente así a mi lado.

Y que rica es la amistad cuando se siente tan intensa, que una llamada de teléfono de 1 minuto ( o de 12) nos deja la sonrisa por todo el día, cuando un mail te hace sentir querida, cuando una carta escrita te conmueve, cuando un vídeo te hace llorar...
Muchas pero muchísimas personas se arrepienten de no haber pedido, no haber dicho, no haber hecho, no haberse atrevido, que mal, no?

Yo solo puedo decir que no me voy a perder ni una sola vez de esas sensaciones preciosas, hay quienes se las pierden y pagan precio alto por ello, ud... se la perdería?

domingo, 23 de mayo de 2010

El closet de mi habitación


Hay algo en mi casa de lo que me siento especialmente orgullosa: mi vestidor (closet, armario) porque todo lo que hay en él, me queda, me gusta y lo uso. Podría parecer que tengo mucho, pero es que soy muy cuidadosa y varias prendas tienen tiempo conmigo.
No hay nada que pueda decir "hace años que no lo uso" "ni recordaba que tenía esto" "voy a guardar esto hasta que regrese la moda" "Uyy esto aún tiene la etiqueta porque no lo he usado a pesar de haberlo comprado hace meses".

Sencillamente, lo que no uso lo he regalado, lo que no me queda ya, lo he regalado, lo que me regalaron y nunca me quedó bien, lo he regalado...

Cuando he comprado algo de un color que ya tengo, casi inmediatamente regalo la prenda anterior y por eso mi guardarropa siempre se está renovando.

Cuando compro algo en el exterior, antes de llegar a mi querido Ecuador, generalmente ya lo he usado, salvo que sea para un evento especial que tendré pronto, yo invento la ocasión especial y uso aquello que me compré.

En mi closet puede faltar mucho, pero no sobra nada. Regalar es una de mis actividades favoritas y disfruto mucho haciéndolo.

Me he dado cuenta que, al salir las prendas, queda espacio para las nuevas. Así debería pasar con el corazón... las personas que salen, deben salir al terminar una etapa y dejar ese espacio para una nueva. Aferrarse a algo (un trabajo, una casa, una posición) o a alguien (un amigo, un novio, un ex) puede ser negativo y tener consecuencias devastadoras. Siempre hay espacio para mas cuando se tiene bien arreglado todo, priorizando lo que necesitas, lo que te sirve, lo que te gusta y lo que te hace sentir bien, aquella prenda que te queda muy bien sin importar cuándo la uses.

Hoy, estoy renovando mi closet otra vez, estoy sacando las prendas que ya no me sientan bien... y eso también pasa con mi vida... afortunadamente.